CENTRO CÍVICO POR LA PAZ

El Centro Cívico por La Paz (CCP) es un espacio físico y simbólico de presencia estatal y encuentro comunitario inclusivo donde se brindarán servicios de asesoría, formación y apoyo a niños y jóvenes de hasta 18 años en situación de vulnerabilidad social, con las condiciones infraestructurales y tecnológicas necesarias para una atención de calidad.

Si bien el CCP de Cartago es una obra de carácter institucional, se hizo necesario que desde su diseño, se replanteara la imagen del edificio institucional, comúnmente percibida por los jóvenes como una representación del estereotipo de "autoridad" asociada a la idea de represión y control, poco atractiva y estimulante para las poblaciones jóvenes.

Lo amplio y variado del programa de necesidades en el cual se mezclan requerimientos y funciones del Ministerio de Justicia y Paz, dele ICODER, del Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes, entre otros, así como por lo limitado del área del terreno disponible, hizo evidente que la implementaron del proyecto en el sitio debía hacerse con la intención de integrar y unir todas las variables funcionales, no sólo con el paisaje inmediato sino de manera especial con el usuario final.

Fue así como su diseño se desarrolló a partir del concepto de vínculo, entendido como una experiencia emocional que une a una persona con un objeto o con otras personas y sugiere la existencia de una estructura que los envuelve más allá de sí mismos.

Este concepto dio forma a un edificio que quería y debía ser predominantemente una PLAZA.

Se propone entonces un diseño en el que los espacios para las actividades lúdicas se hacen muy visibles y cuya accesibilidad se hace claramente legible para los usuarios que se aproximan a él desde las zonas peatonales tangentes, así como desde las que lo recorren y atraviesan. Su forma y distribución interna se vale del movimiento para cumplir con el objetivo de convertirse en un atractor, ofreciendo múltiples opciones tanto para el recorrido como para la apropiación del espacio. Así el proyecto es a la vez un facilitador, polivalente y dinámico que colabora con la co-gestión Inter-institucional para crear una experiencia de encuentro con la comunidad.

En busca del balance entre lo permanente y lo temporal que sucede en los espacios urbanos, se propone la ampliación de estos últimos más allá del programa funcional del proyecto. Por esta razón se integra al norte de la plaza ya existente y hacia el suroeste se sugiere el cierre de la calle que separa la escuela con el CCP, para generar una zona segura para los niños en su paso hacia el Centro Cívico donde la comunidad realice actividades semanales como la ya existente Feria del Agricultor de los sábados y eventos especiales al aire libre.

El CCP de Cartago quiere ser , finalmente, un facilitador de la integración social a partir de la generación del espacio urbano inclusivo, que guarda en su interior orar ser re-descubierto mediante el recorrido, un encuentro con la oportunidad que se ofrece a los jóvenes de crecer a través de la cultura. Un lugar para nutrir el vinculo entre el individuo y la comunidad a la que pertenece.